Jondher ha estado enviando datos falsos y unos Guardias de confianza le han confirmado que los delincuentes se han movido conforme a esos datos. El teniente le dice que los tienen donde ellos quieren, pues la verdad es que si los delincuentes hubieran querido, podrían haberse marchado, pues si salían por el estacionamiento no iban a ser detenidos y menos ellos, que habían sobornado a bastante gente. El rumor de que estos Guardias no son de confianza es falso, así como también el rumor de que están parando a todo el mundo. Tal vez sí los hubieran parado, pero un soborno habría arreglado las cosas. La banda ha sido engañada, la trampa es mortal y ellos no lo saben.
Jonayker saca la película que acaban de ver del DVD y va en busca de la carne con papas. “¿Cuál vas a poner?” Pregunta Yan, con curiosidad. “La Private esta, la tipa se parece a Rachel, la de Friends.” Dice, con cierta risa y todos aprueban y es que de verdad, la actriz porno que aparece en la carátula, se parece a Jennifer Aniston, la protagonista de la mencionada serie. “Ayer estábamos viendo Warner Channel mi esposa y yo y vimos un capítulo de esa mierda. Cómo nos hemos reído, marico” Comenta tranquilamente Brandon.
Erick los manda a todos a la mierda y comienza a preparar un porro. Nadie dice nada porque en el fondo, todos van a fumar también. Mientras lo prepara, ya la porno ha avanzado y comienzan a aburrirse los espectadores.
Ya se han fumado dos porros y la película se está acabando. Ha pasado la escena donde sale la actriz que se parece a Jennifer Aniston y Yan comenta que se va a coger a una puta que se parezca a ella. Todos se ríen y se reparten una nueva ronda de cervezas.
Los militares han llegado al destino. El carro se detiene a la entrada del callejón, pero ningún Guardia se acerca, pues aparte de que se trata de un vehículo militar, saben que dentro hay comandos y con esos no conviene meterse. Ellos tienen fama de asesinos. Así que el escuadrón antidrogas se baja y rápidamente entran en el solitario callejón.
De primero va el teniente, luego va Traspalacios. Les siguen Jondher, Machuca y el cabo que tiene ojo clínico y sabe cuidar bien a sus compañeros. No por estar de último, se salva del peligro. De hecho, lo más probable es que sea él quien dispare primero.
Llegan a la puerta. El cabo viene con el plástico y coloca dos cargas, de las usadas para volar cerraduras. La reja está cerrada, pero logran minar también la puerta, ya que pueden meter la segunda carga entre las rendijas. El cabo une ambas bombas al detonador que tiene y le ve la cara al teniente. Es la hora de la verdad.
A pesar de que afuera se prepara una emboscada mortal, el cartel está planeado continuar con su rumba. Jonayker les dice que achanten el otro porro, para que el hedor se disipe, mientras que Brandon mira los vidrios de la ventana. Un presentimiento le llega; pero de inmediato, y ayudado por la cerveza, se olvida del asunto.
Entonces el teniente le hace un gesto afirmativo con la cabeza al cabo, quien acciona la mecha y se aleja. El teniente tiene lista la granada. Ambas cargas estallan con un sonido seco, el cabo abre la reja y el teniente abre sólo un poco la puerta, para lanzar la granada. Se escuchan las voces de los delincuentes, pero no se entiende pues estalla la granada y entra el grupo, uno detrás de otro, el teniente dispara y es Jonayker quien recibe tres balazos en el pecho, el resto del comando se despliega en columna y hacen una línea de fuego y comienzan a disparar al resto. Mientras Jonayker es acribillado, Yan recibe una ráfaga que le pega en los brazos, en la barriga, en el esternón y la cabeza. Brandon se lanza al piso, pero en el aire recibe una ráfaga en el costado, brazo, pierna y cuello. Erick es quien logra sacar su pistola, pero ya ha recibido una ráfaga mortal en todo su tronco, aún así dispara y el fuego de los fusiles se dirige al delincuente que de inmediato es cosido a plomo. Cuatro disparos que recibe en el rostro, lo dejan desfigurado. Cae al piso como un saco de papas. De inmediato, todos los militares recargan sus fusiles. El cabo se coloca en la puerta y vigila. Le ordena a Machuca salir y vigilar afuera. El cabo está en la puerta. Si vienen más delincuentes, ambos podrán repelerlos y podrán los militares formar una posición defensiva en la casa. El resto, inspecciona los caídos. Todos mueren ametrallados como ratas.
Jonayker saca la película que acaban de ver del DVD y va en busca de la carne con papas. “¿Cuál vas a poner?” Pregunta Yan, con curiosidad. “La Private esta, la tipa se parece a Rachel, la de Friends.” Dice, con cierta risa y todos aprueban y es que de verdad, la actriz porno que aparece en la carátula, se parece a Jennifer Aniston, la protagonista de la mencionada serie. “Ayer estábamos viendo Warner Channel mi esposa y yo y vimos un capítulo de esa mierda. Cómo nos hemos reído, marico” Comenta tranquilamente Brandon.
Erick los manda a todos a la mierda y comienza a preparar un porro. Nadie dice nada porque en el fondo, todos van a fumar también. Mientras lo prepara, ya la porno ha avanzado y comienzan a aburrirse los espectadores.
Ya se han fumado dos porros y la película se está acabando. Ha pasado la escena donde sale la actriz que se parece a Jennifer Aniston y Yan comenta que se va a coger a una puta que se parezca a ella. Todos se ríen y se reparten una nueva ronda de cervezas.
Los militares han llegado al destino. El carro se detiene a la entrada del callejón, pero ningún Guardia se acerca, pues aparte de que se trata de un vehículo militar, saben que dentro hay comandos y con esos no conviene meterse. Ellos tienen fama de asesinos. Así que el escuadrón antidrogas se baja y rápidamente entran en el solitario callejón.
De primero va el teniente, luego va Traspalacios. Les siguen Jondher, Machuca y el cabo que tiene ojo clínico y sabe cuidar bien a sus compañeros. No por estar de último, se salva del peligro. De hecho, lo más probable es que sea él quien dispare primero.
Llegan a la puerta. El cabo viene con el plástico y coloca dos cargas, de las usadas para volar cerraduras. La reja está cerrada, pero logran minar también la puerta, ya que pueden meter la segunda carga entre las rendijas. El cabo une ambas bombas al detonador que tiene y le ve la cara al teniente. Es la hora de la verdad.
A pesar de que afuera se prepara una emboscada mortal, el cartel está planeado continuar con su rumba. Jonayker les dice que achanten el otro porro, para que el hedor se disipe, mientras que Brandon mira los vidrios de la ventana. Un presentimiento le llega; pero de inmediato, y ayudado por la cerveza, se olvida del asunto.
Entonces el teniente le hace un gesto afirmativo con la cabeza al cabo, quien acciona la mecha y se aleja. El teniente tiene lista la granada. Ambas cargas estallan con un sonido seco, el cabo abre la reja y el teniente abre sólo un poco la puerta, para lanzar la granada. Se escuchan las voces de los delincuentes, pero no se entiende pues estalla la granada y entra el grupo, uno detrás de otro, el teniente dispara y es Jonayker quien recibe tres balazos en el pecho, el resto del comando se despliega en columna y hacen una línea de fuego y comienzan a disparar al resto. Mientras Jonayker es acribillado, Yan recibe una ráfaga que le pega en los brazos, en la barriga, en el esternón y la cabeza. Brandon se lanza al piso, pero en el aire recibe una ráfaga en el costado, brazo, pierna y cuello. Erick es quien logra sacar su pistola, pero ya ha recibido una ráfaga mortal en todo su tronco, aún así dispara y el fuego de los fusiles se dirige al delincuente que de inmediato es cosido a plomo. Cuatro disparos que recibe en el rostro, lo dejan desfigurado. Cae al piso como un saco de papas. De inmediato, todos los militares recargan sus fusiles. El cabo se coloca en la puerta y vigila. Le ordena a Machuca salir y vigilar afuera. El cabo está en la puerta. Si vienen más delincuentes, ambos podrán repelerlos y podrán los militares formar una posición defensiva en la casa. El resto, inspecciona los caídos. Todos mueren ametrallados como ratas.
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